Trastornos vestibulares: Los trastornos vestibulares son afecciones que afectan el sistema vestibular, que es responsable de mantener el equilibrio y la orientación espacial. Los síntomas comunes de los trastornos vestibulares incluyen mareos, vértigo, desequilibrio y sensibilidad al movimiento.
Rehabilitación vestibular: la rehabilitación vestibular es una forma especializada de fisioterapia que tiene como objetivo abordar las causas subyacentes de la disfunción vestibular y mejorar síntomas como la sensibilidad al movimiento y los mareos.
Intervenciones basadas en evidencia: existen varias intervenciones basadas en evidencia para la sensibilidad al movimiento y los mareos en los trastornos vestibulares, y muchas de estas intervenciones son compatibles con la rehabilitación vestibular y la fisioterapia.
1. Maniobras de reposicionamiento de Canalith
Las maniobras de reposicionamiento de Canalith, como la maniobra de Epley y la maniobra de Semont, son intervenciones efectivas para ciertos tipos de trastornos vestibulares, como el vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB). Estas maniobras tienen como objetivo reposicionar las otoconias desplazadas dentro del oído interno, lo que puede ayudar a aliviar los síntomas de mareos y vértigo.
2. Ejercicios de estabilización de la mirada
Los ejercicios de estabilización de la mirada son un componente clave de la rehabilitación vestibular y la fisioterapia. Estos ejercicios tienen como objetivo mejorar la coordinación de los movimientos oculares y de la cabeza durante actividades que provocan mareos o sensibilidad al movimiento. Al mejorar la capacidad de mantener una mirada estable durante el movimiento, las personas con trastornos vestibulares pueden experimentar una reducción de los síntomas de mareos y sensibilidad al movimiento.
3. Entrenamiento de equilibrio
Los ejercicios de entrenamiento del equilibrio son esenciales para abordar el desequilibrio y la sensibilidad al movimiento en personas con trastornos vestibulares. Estos ejercicios a menudo implican desafiar el equilibrio y la coordinación a través de diversas actividades, como pararse sobre superficies inestables, caminar sobre diferentes terrenos y realizar movimientos dinámicos que requieren ajustes rápidos en la posición del cuerpo. Mediante un entrenamiento constante del equilibrio, las personas pueden mejorar su capacidad para mantener la estabilidad y reducir los mareos asociados con la sensibilidad al movimiento.
4. Ejercicios de habituación
Los ejercicios de habituación implican exponer a los individuos a estímulos repetidos que provocan mareos o sensibilidad al movimiento, con el objetivo de reducir la intensidad de los síntomas con el tiempo. Estos ejercicios están diseñados para desensibilizar el sistema vestibular y el sistema nervioso central a movimientos específicos o estímulos visuales que desencadenan los síntomas. Con una exposición constante y gradual, las personas pueden experimentar una menor sensibilidad al movimiento y una mejor tolerancia a las actividades que anteriormente causaban mareos.
5. Ejercicios de adaptación vestibular
Los ejercicios de adaptación vestibular se centran en promover la adaptación y compensación dentro del sistema vestibular. Estos ejercicios tienen como objetivo facilitar los cambios neuroplásticos que mejoran la capacidad del cerebro para procesar información sensorial relacionada con el equilibrio y la orientación espacial. Al realizar movimientos y actividades específicos que desafían el sistema vestibular, las personas pueden mejorar la capacidad del cerebro para adaptarse a la disfunción vestibular y reducir los síntomas de mareos y sensibilidad al movimiento.
Conclusión
En general, las intervenciones basadas en evidencia para la sensibilidad al movimiento y los mareos en los trastornos vestibulares abarcan un enfoque integral que integra rehabilitación vestibular y técnicas de fisioterapia. Al abordar la disfunción vestibular subyacente e implementar intervenciones específicas, las personas con trastornos vestibulares pueden experimentar mejoras en la sensibilidad al movimiento y los mareos, lo que conduce a una mejor calidad de vida y una independencia funcional.